Termina el año en ésta tierra azteca herida de manera permanente. Hay agotamiento en las miradas. Dominó la corrupción.
Tantos años y los mexicanos no hemos aprendido nada. Nos esperan años
difíciles. Chocaremos en piedras puntiagudas, se abrirán y sangrarán de nuevo
las heridas. Tendremos que sobrevivir para reiniciar. Lo hemos hecho tantas
veces.
El horizonte se abre entre llamas; desde el
fondo, el océano truena. El recuerdo milenario de sacrificios y muerte aparece
como holograma y nos lastima las pupilas. Iniciamos un camino de regreso, un
principio conocido. Habrá que quemar los
miedos, lanzarlos al mar para que desaparezcan en la vorágine, en el ruido
profundo del océano.
¡Estamos vivos! dicen los zapatistas y se asoman
entre el silencio escandaloso de la injusticia, nos sacuden. Siempre se van los
mejores, se esconde la verdad y se
ignora al necesitado.
Brindo por México, esta vez no brindo por los
mexicanos. Que cada uno se responsabilice de sus actos, de sus decisiones. Les
ofrezco un abrazo y la seguridad de seguir aquí, en la trinchera, en la crítica
severa, en la corresponsabilidad.
Resulta que después de todo nos queda la
esperanza, como último recurso…
Agregado…
Tengo una historia interesante que
narrarles. Lo haré en la primera semana del 2013. Es algo real que se ha
transformado en comedia y por momentos toma perfiles surrealistas.
Hace unas semanas me llegaron también buenas
noticias con lo que respecta a mis letras, pronto les contaré los pormenores con
pelos y señales.
Este año leí treinta y cinco libros
completos; quedaron incompletos de leer quince; esperando ser iniciados:
sesenta en formato ePub y cuarenta en bellas hojas de papel.
Escribí diez cuentos completos, catorce
inconclusos y una novela corta sin terminar.
Perdí un amigo entrañable que ahora es una
estrella brillante que me guiará. Sigo necesitando tiempo para mis letras.
Hubo: reencuentros, amigos, caricias, citas
clandestinas, escapes nocturnos, tres viajes, algunas cenas y comidas
románticas.
El fin del mundo me dejó esperando.
Ahora se acerca la noche buena, la navidad y
el año 2013.
Los quiero…
¡FELICES FIESTAS!
Foto tomada AQUÍ
Mafalda
desde si misma…
1 comentarios:
Siempre habrá esperanza. Un abrazo.
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