Escuchen la Rola: “La canción más hermosa del mundo”. Canta: Buena Fe. Letra: Joaquín Sabina.
Por qué el amor será tan importante si lastima tanto. Eso de transformarse, suspirar, perder la objetividad: nuestro tiempo se encuentra determinado por el ritmo de latidos ajenos y de momentos compartidos. Nos convertimos en seres arrebatados, zarpamos sin rumbo ni brújula. Las razones y el análisis de las cosas es de complemento suicida; aún así, damos el primer paso con él o ella guardados en la maleta.
-Brillamos, juntos-, decimos.
-Somos, felices, juntos-, replicamos.
-Logros, mutuos, para dos-, aseguramos.
¡El amor no tiene piedad, nos roba el aire!
Por eso habrá que colocarle un filtro arrollador o una coma a cada acción,
s e p a r a r l a s.
Hacer del amor un i n d i v i d u o.
Si no seguimos estas dos normas, estaremos perdidos.
Recomiendo, para este mal, tomar cinco minutos de aire para no morir de amor…resucitar en caso de pérdida y desintoxicarse en caso de envenenamiento.
Amé.
Sembré raíces.
Iré con otros,
te permaneceré.
Consolido más caricias,
no serán tuyas.
Estaré contigo,
sin estar.
Existo aunque no me mires;
te regalo recuerdos
en piedras.
El amor debe ser libertad
de soñar el horizonte sin perderse.
Te amo, te amé.
Y desde el primer momento
no estarás, no estaré sola.
No se trata de olvidar.
Los recuerdos son verdadera compañía cuando dejan de hacer daño…
Recuerdo del día: Ayer hablé del azar y del destino con un amigo. Del amor, también. Voy terminando de leer una novela de sueños y destinos, la sentí absurda. Las casualidades me parecieron fuera de contexto, rayando en lo infantil. La terminé por necedad más que por otra cosa. El azar objetivo y la causalidad me interesan. Las casualidades definidas como destino manifiesto, me irritan. Me cuesta creerlas. No hablaré de ese libro. Al que me referiré es a otro donde el escritor manejó algunos elementos similares pero con maestría.
La búsqueda interna, el azar y los giros que encontré en “El Palacio de la Luna” de Paul Auster, me parecieron interesantes. El elemento de la soledad, siempre presente en sus novelas, me lastimó. Lo mejor: aprendí algo fundamental dentro de la narrativa en la cual el azar juega un papel importante; es la utilización de la metaficción: Marco Stanley Fogg, protagonista de la novela, hereda de su tío miles de libros. Stanley se encuentra en la miseria y utiliza los libros como muebles (mesa, escritorio, silla, cama). Cuando llega al límite, vende poco a poco los libros, pero no sin antes haberlos leído conforme se iba deshaciendo de cada uno. Y, es así como sus muebles van encogiéndose hasta desaparecer; y su búsqueda interna, alimentándose de referencias literarias.
Deberíamos estar preparados para todo, dice Auster, porque sino, no estaremos preparados para nada…
Mafalda desde si misma…
Foto de An Intimate Performance
1 comentarios:
Casualmente leo ‘Diario de Invierno’. Ahí, Auster también recurre al papel del azar. Pero, sobre todo, juega con los recuerdos. Hubo una parte en que e sentí muy tocada: cuando recuerda un trancazo que le dan en la frene jugando pelota. Me recordó tanto a mi niñez, siempre dándome batacazos.
Muy bonita foto.
PS Tu plantilla es muy bonita, peor se pone sus moños para la comentada. :P
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