Me senté a escribir una historia.
Frente a mi escritorio, el ventanal detenía el halo frío de invierno que dejaba opacado el cristal. Afuera había susurro y movimiento. Los pinos le arrebataban las palabras a los matorrales enanos. Al césped le brillaba el roció helado. Sobre un tronco irregular, una ardilla le permitía al viento que la acariciara; mientras tanto el olor a madera se metía en las narices húmedas de Tito mi viejo pastor inglés de dos años de edad.
A Tito le gusta jugar con ardillas, las persigue por el pasto hasta que burlonas, lo cansan, entonces, los juguetones roedores se suben a las ramas altas de los pinos y desde ahí lo miran triunfantes.
De pronto, escucho a Tito ladrar…descubrió a la ardilla.
Sé que estás ahí pero ¿dónde?, le dije a la idea.
¿Soñé la historia?
¿Soñé la historia?
Vi una casa de colores.
Un lunes conocí la casa. Tiene un jardín con abedules y margaritas. El recibidor, la cocina pequeña de madera rústica y el estudio están en la planta baja. Tiene escaleras en espiral para llegar a otro piso donde hay una habitación amplia con ventanas que miran hacia el sur. La madera de la cama y de los muebles es porosa y tosca. Al pie de la cama hay uno de varios baúles antiguos, es el más grande. Los demás están en fila y recargados en las dos paredes laterales de la recámara y son de diferentes tamaños. Desde esa habitación con baúles el jardín de margaritas es una sábana blanca moteada de puntos amarillos. El cuarto de lavado mira hacia la parte posterior de la casa. Ese día la dueña había lavado algunas prendas, se movían en mecates y amenazaban con fugarse ayudadas por el viento.
Un martes abrí el baúl grandote y salieron algunas imágenes; se desprendieron de las envolturas de papel donde las tenían guardadas.
Un miércoles, casi me sorprende ella escudriñando recuerdos. Me escondí bajo la cama.
Un jueves, la espié a través del ventanal del estudio. Miré libreros atiborrados de libros, sobre uno de los sillones de descanso, brillaba un saxofón. Llovía, pero no me importó mojarme. A ella la acompañaba un colibrí. En el recibidor colocó una pecera donde alojó quince peces.
Un viernes, por fin me vio.
Un lunes conocí la casa. Tiene un jardín con abedules y margaritas. El recibidor, la cocina pequeña de madera rústica y el estudio están en la planta baja. Tiene escaleras en espiral para llegar a otro piso donde hay una habitación amplia con ventanas que miran hacia el sur. La madera de la cama y de los muebles es porosa y tosca. Al pie de la cama hay uno de varios baúles antiguos, es el más grande. Los demás están en fila y recargados en las dos paredes laterales de la recámara y son de diferentes tamaños. Desde esa habitación con baúles el jardín de margaritas es una sábana blanca moteada de puntos amarillos. El cuarto de lavado mira hacia la parte posterior de la casa. Ese día la dueña había lavado algunas prendas, se movían en mecates y amenazaban con fugarse ayudadas por el viento.
Un martes abrí el baúl grandote y salieron algunas imágenes; se desprendieron de las envolturas de papel donde las tenían guardadas.
Un miércoles, casi me sorprende ella escudriñando recuerdos. Me escondí bajo la cama.
Un jueves, la espié a través del ventanal del estudio. Miré libreros atiborrados de libros, sobre uno de los sillones de descanso, brillaba un saxofón. Llovía, pero no me importó mojarme. A ella la acompañaba un colibrí. En el recibidor colocó una pecera donde alojó quince peces.
Un viernes, por fin me vio.
Existen diferentes formas de leer.
Hay quien escucha lo escrito.
Hay quien ve lo que lee.
Hay quien vive lo que lee.
Hay quien lee y se reconoce.
Hay quien escucha lo escrito.
Hay quien ve lo que lee.
Hay quien vive lo que lee.
Hay quien lee y se reconoce.
Existen cosas que no te escribo, o tal vez pienso que no lo hago,
y sin embargo vienes y las lees.
Quisiera decirte muchas cosas y a veces,
sólo salen frases incompletas o se fabrican historias absurdas.
Se pintan colores…
Logré por fin darle forma a los ruidos que hacíamos cuando nos amábamos, se oyeron los gemidos, ¿verdad?
Hice un bosquejo formado de paredes, luego los escribí, los dibujé y los repetí muchas veces.
En este momento lees lo que escribo, viajas a través de estas palabras como yo lo hago montada en el espesor de los recuerdos.
Soy un recuerdo, en eso me convertí,
esperas que vuelva pero,
sin irme aún,
regresé.
Y me lees…
¡Ah!, por cierto, Ateh, soy Dorotea, le dije el día que por fin me vio.
FIN
y sin embargo vienes y las lees.
Quisiera decirte muchas cosas y a veces,
sólo salen frases incompletas o se fabrican historias absurdas.
Se pintan colores…
Logré por fin darle forma a los ruidos que hacíamos cuando nos amábamos, se oyeron los gemidos, ¿verdad?
Hice un bosquejo formado de paredes, luego los escribí, los dibujé y los repetí muchas veces.
En este momento lees lo que escribo, viajas a través de estas palabras como yo lo hago montada en el espesor de los recuerdos.
Soy un recuerdo, en eso me convertí,
esperas que vuelva pero,
sin irme aún,
regresé.
Y me lees…
¡Ah!, por cierto, Ateh, soy Dorotea, le dije el día que por fin me vio.
FIN
FIRMA: Un ser de este mundo.
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15 comentarios:
depende quien escriba y como se deje leer es como me dejo ir entre las palabras, las escucho, las veo, las vivo, las olvido, las odio, lasrespiro, las mato, las necesito... es bien diferente cada vez.
abres puertas con cada una de las que tu escribes, eso te puedo decir sin temor a equivocarme, y en lo personal hasta me intimidan de lo grandes que son, pero... Me gustan! y mucho.
te dejo un beso muñequita.
Me quede pensando...creo que de las cosas que mas me da miedo en la vida es ser un recuerdo, estando viva. que no me entere.
…
Respuestas a últimos comentarios del post: “LOS LIBROS Y NOSOTROS”
Aurore Dupin:
Un honor tenerte como visita y más saber que somos colegas.
Te diré que hace unos años, un médico amigo mío me contó que uno de sus amigos (contador público) le dijo que él no se casaría con una médica, porque sospechaba que no se excitaban. Yo me quedé impávida: “¿Cómo es eso?” le dije. Me contestó mi amigo: Fíjate que piensa que como ustedes médicas ven cuerpos de hombres desnudos en libros y en vivo, ya no les emociona mirar a otro hombre fuera de lo médico.
Aurore, tú y yo sabemos que esos hombres diminutos, que analizan tan lineal las cosas, existen. Lo bueno es que existen los inteligentes ¿verdad?
Lumpenpo:
Gracias por la información. Pero creo que me quedo con mis blogs, ya no deseos experiencias jejeje…
También te agradezco los datos de ayuda para el templete. Y con lo que respecta a mis cuentos, ya te contesté en tu blog.
Marichuy:
Gracias por tu valiosa ayuda.
Mira, ¿Qué tal quedo? Yo no lo hice, fue una conocedora de la compu.
Amigocha Alejandra:
Tus deseos amiga son órdenes para mí.
Espero te guste la imagen y además puedas leer bien.
Arian:
Mi querida Mixtli. Gracias por tu visita. Pasé a dejar saludos en tu blog pero no encontré palabras. Espero tu regreso.
W:
Ya escrí, jejeje, ¡Gracias!
Champignon:
Tenía unas nalgas deliciosas jajajá.
Mi Cornelio estará en el recuerdo de los que lo conocieron y por supuesto en el mío.
Mafalda
…
Respuestas a comentarios del post: “PARA CONOCER A LA DESCONOCIDA”
Marichuy:
Tú róbate lo que quieras mi pequeña. Insisto en que es mejor sacarle provecho a vivir en la quejumbres persistente.
La historia se las dejaré de tarea para que cada quien le dé el matiz que más le agrade.
Champignon:
Jajajá… Prefiero que me digas cabrona a que me digas penitente o estúpida jejeje.
La desconocida es la de todo en esta historia, ya lo verás.
Invitaré a cada uno a convertirse en su propia Dorotea(o).
Jota pe:
Hermoso, gracias. Diste en el blanco, y eso que no leíste la historia desde el principio.
W:
Pues a buscar el cómo y el dónde le sacamos provecho a todo mi flaquita.
Diego:
No te pierdas tanto tiempo mi amigo. La desconocida espera ser conocida por vos.
Sonia:
¿En verdad deseas conocer a gente así de rara? Jajajá, bueno, tú sabrás pues.
Un saludete mija. Ashhh, no se me hizo la foto pues, yo miré rayos y centellas, olas gigantes y un faro esperando el embiste.
Incitatus:
Mmm, sospecho que andas cercano mi poeta y escritor. Ojalá crucemos camino…
Lumpenpo:
Wuauu, chido, me siento satisfecha que sientas y veas.
Gracias poeta por tus mensajes y tu confianza…y muchos agradecimientos más por tus consejos.
Kix:
Uta, medio tardada soy para contestar, pero ya pase a agradecer las chelas en tu blog.
PaoValdivieso:
No, pos’ sí pues. Gracias por la visita. Me daré una vuelta a tu choza en unos días.
Champignon hermoso:
¿¿¿Perdiste la objetividad??? Jejeje…de eso se trata. Me encanta lo autentico mi Champy. Hay cosas que pueden resultar locuras para la gran mayoría de las personas. Dentro de esas locuras se puede esconder lo extraordinario, lo diferente. Me gusta que veas más allá de lo convencional.
Esta historia se terminará, les dejaré un margen amplio a los pocos lectores que la siguieron desde su inicio. Ese margen es para incitar a la creación, a la imaginación.
Tus abuelas me encantaron. La historia de tus tías me hizo reír. Y por último, te dedico un pedacito del post: “La Historia”, donde hablo del un animalito con el que jugaba tu mejor amiga.
Besitos de Cornelio para ti.
Mafalda
Mi Mafis:
Me catalogo en el 3er punto:
Hay quien vive lo que lee
Lo hago cuando leo y después de leer.... y a veces es MUY PELIGROSO... :)
Y precisamente... sigo leyendo...
Besos muchos
De repente me angustié por no encontrar donde dar click para el comentario... llegué al final y lo encontré, uff, que si no voy corriendo al mail y continuo la correspondencia... días aciagos de virus y trabajo acumulado.
Agrego: hay quien lee y lee para descubrir a quien está detrás de las letras, como espiar una casa de colores y atrapar imágenes, palabras son recuerdos y nuestros nombres son eso, simples recuerdos de imágenes que se van decolorando en el sepia de los años, al final eso somos, en el extremo fin sólo una lápida para el recuerdo.
Besos y saludos a cornelio que debe andar por ahí, sin preocupación bebiendo néctar de flores húmedas.
M. Mafis
Huy pues seré soberbia, pero a veces -no digo que en todo un gran texto, pero sí en pequeños fragmentos- leo y creo reconocerme. Y eso me encanta, aunque no necesariamnete me haga feliz.
Un beso Mafis
-- Mafita, eres escurridiza como una ardilla, por mas que te persegui no te atrapo y me he quedado colgado de ese saxofon que tibio vocifera cantares, que bueno es encontrarte en los ojos de Dorotea!
Mafalda:
A mí fascinó la sinestesia desde que leí "El misterio de los niños chatarra" de Bayona: me encanta darles sonidos a las figuras, colores a los olores...remedios a los dolores...y ninguno como la lectura.
La medicina y la lectura, como magnánimas mujeres que son, tienen para todos (chicos, no se vayan con la perspectiva a lo Mesalina, por favor).
Con respecto al comentario del tío de visión lineal...también conozco el proceso de digestión, y no me priva del placer enólico ni del pantagruélico (y ya ni hablar de la estimulación vagal por ciertas prácticas mundanas, je, je).
Conozco el proceso de enamoramiento traducido en neurotransmisores, y eso no implica que el éxtasis sea menor.
Eso sí: tengo que reconocer que adopto una dualidad cuando me pongo una bata, pero por pura ética, alejando la estética ¿qué te puedo contar a ti que desconozcas?
Saludos fisiológicos conocidos y re-conocidos.
Ok.
Te compro todo. Que culero yo verdad? Pero noooo........
Además debo decirte que aunque tu creas que eres lenta nel, ni madres, lento yo, que aún no acabo con la anterior y ya me recetaste ésta!
Ayer te lleve impresa (que feo soy verdad???), te degusté en la noche...y supuse intuí adiviné lo que hoy me dices...... eres conciente de la magnitud de mi asombro? pue que si, pero no.... no te dije platique conté relate lo ocurrido trás la desaparición de Manola, se que tu eres mágica y Corne bien educado....pero la vida es más cabrona de lo que creemos y quisieramos...cuando ponemos todo lo nuestro en un soporte tán "frágil", luego de, duele, y duele gacho, tanto que uno aprende a ver y leer y oler y soñar y evadir y sentir y....prendemos y apagamos botones nomás, como única arma, lo demás, es eso que llaman vida.
No me hagas mucho caso, voy a una junta y deja carburo unos días, echo madres, busco que chupar si puedo me atraganto y regreso.
Con María aprendí a amar mucho de lo que ahora me protege, ahí me hice adicto a los excesos..... pero eso, es otra historia.
Esta navidad pensaba regalarme una pareja de Bengalíes, pero me han dicho de una casa que .....
2046
Ah mi Mafis me encantó eso de que puede leer lo que no escribes...
A veces quisiera ser del tipo de los que viven lo que leen, pero creo que encajo mejor en los que escuchan lo escrito, y a veces en los que se reconocen en él...
Cada vez descubro nuevas habilidades... Ahora es el olor a madera y el perseguir ardillas...
Oye, me entró una curiosidad: por qué quince peces, ah??... Por qué no catorce o dieciseis??...
Un abrazo, mi bella amiga...
Guauffff!!!...
Hola, Mafalda
cambiaste de blog, con razón no entendía lo que pasaba.
Ahora el personaje de Dorotea le da un giro a esta novela.
Te mando saludos
un gusto pasar por acá.
Vine de nuevo, en espera de verte y leerte, de volver...
A veces tengo nostalgia y con ella vienes tu y Dantés y tantos otros a los que he perdido en el camino, como he perdido trocitos del corazón... sabes? a veces que uno no encuentre los trocitos del corazón no es necesariamente malo no? siempre que se encuentre el resto...
…
Sonia:
En algún momento de nuestras vidas nos convertiremos en recuerdo. No hay de otra mi Sonia. Tienes muchas formas de leer mija.
W:
¡Nel! No debe resultarte peligroso, el involucrarse en la historia, nos hace disfrutarla más.
Un besote para ti mi amiga.
Lumpenpo:
¿Será que sí logres mirar a la aprendiza de escritora? Jejeje.
Sí mi poeta, yo también, como tú y muchos, soy un recuerdo…
Marichuy:
Yo tambor mi peque jejeje, y si parece soberbia no me interesa jajajá…
Saludete para ti.
Jota pe:
Hola guapo… O_=
¿Qué tal mi cerrada de ojo? Jejeje… Así como ardillita me gusta escurrirme, me gusta coquetearle a la vida. No como diva, las divas son poses sublimes que hacen caer a hombres carnales. Las inquietas y en verdad misteriosas, son plenas y directas, que dejan de palmo en palmo el perfume de la duda, jalando a los hombres inteligentes y apasionados.
Besete y abrazete para ti.
Aurore:
Vaya pues, no creo tener la capacidad de crear figuras retóricas de ese nivel. La metonimia es la herramienta que sin antes conocerla en su definición, yo utilizaba (y creo lo sigo haciendo, no muy bien pero lo intento) para interrelacionar objetos.
Algunos escritores logran con facilidad que entre a sus historias, las huela, las oiga, las palpe, por consiguiente las viva. Otros simplemente no.
Yo veo, escucho, huelo y palpo a mis pacientes. Y cada uno es una historia.
Yo también soy dual, con el disfraz blanco soy una, sin el soy dos jejeje…
Saludetes electrofisiológicos de alegría para ti.
Champignon:
Jejeje, tú cómprate los pajarillos que más te gusten. Disfruta los baños en tina; las caminatas sobre la nieve; los almuerzos con café y librito; las tardes con vino, tabaco y música; y principalmente disfruta que has hecho, vivido, sentido, amado, llorado, mentado madres, etc.
Jodidos aquellos que no han experimentado algo apasionado, algo digno de recordar.
Un besotote mi Champy.
Kix:
Sip, a mí también me gustó cuando se me ocurrió escribirlo, y además darme cuenta que así sucede.
Diego:
¡Chale!, ¿a poco a ti no te gusta mirarlas?, tienen una colita bella, enroscadita y peluda. El olor a madera me encanta, incluso me traslada.
Estoy segura que si pongo seis peces, también me preguntarías jejeje…puse quince porque deseé que mi lector imaginara una pecera grande, pero bueno, esa era mi idea. A lo mejor no lo logré.
Abrazo y beso para ti.
e.r:
¡Sí! Que bien que te das cuenta de lo de Dorotea. Y bueno, esta novela loca, tendrá que corregirse y aumentarse en mi ordenador. Aquí en el blog, se termina como está.
Un gusto y honor para mí que me visites escritor.
Arian:
Mixtli de mi corazón. Cuando conocí este mundo blogger, tu blog fue uno de los primeros que leía. Me intrigaba saber quién era esa doctora melancólica que tenía un corazón enorme. Te has retirado y regresado en varias ocasiones, así como Edmundo Dantes (otro melancólico).
Aquí en mis letras está un pedacito de tu corazón, ¿recuerdas? "Hoy, noto que no te queda nada... y me pregunto cómo encontrar lo desencontrado, en soledad de lo acompañado" "Mixtli"
Te envío un abrazete fuerte, fuerte…
Mafalda
Primero, que buena declaración de principios estas reglas de comentarios! Ok, viste, uno se siente presionado así...
Veamos si sale algo "inteligente" de esta calabaza,
Hay diferentes formas de leer, sí, hay quien experimenta si la lectura se condice con lo que está viviendo, y sino deja... eso me pasa con los libros últimamente. Leo más en pantalla, y breve.
Ahora, qué hay de la escritura? Hay muchas y variadas formas de escribir, como una paleta de colores agradable.
Ayer pasé en San Telmo por una esquina que estaba tu estatua Mafalda, sentada en un banquito, esperando al vecino o turista para la foto. A pocos metros te la revelaban... Le pregunté al heladero cuál era la puerta misma de la casa de Quino. Me dijo que unos metros más adelante. Caminé y me encontré con un mega boliche, Moliere... y se acabó la cuadra. No se estará convirtiendo en un vil negocio más del capitalismo, quiero suponer! Mafalda al poder!
Saludos.
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